Hemos adorado a dioses falsos y todos esos dioses nos han desilusionado. El profeta Isaías nos muestra una visión de Dios que nos deja ver que Él es superior a todas las otras cosas que quieren robarse Su lugar. Este verano, fortalezcamos nuestra fe contemplando la grandeza del que responde a nuestras inquietudes diciendo: YO SOY JEHOVÁ.
En esta serie vamos a explorar cómo es que buscamos apuntarnos entre nosotros y a nuestras comunidades hacia Jesús en nuestros contextos particulares.
Hablaremos de cómo movernos de la supresión a la Celebración, de la distracción a la Conexión, del aislamiento a la Comunidad, y del consumo a la Contribución.
El libro de los salmos se conoce como el “Himnario del Antiguo Testamento” — una colección de cánticos para que el pueblo de Dios responda a Su amor el cual ha sido revelado a través de Jesucristo.
Nuestros corazones cantan sobre las cosas en las cuales se deleitan ¡y Jesús vino a poner un cántico en nuestros labios!
Les queremos invitar a que nos acompañen a través de nuestra serie “Cánticos del Salvador - Verano de Salmos” para que juntos nos deleitemos en el Señor Y para que cantemos de Su bondad, de Su gloria, y de Su gracia.
¿Quién es Jesús? Muchos tienen su propia opinión, pero Jesús habló sobre Sí mismo de manera clara en cada ocasión en el libro de Juan donde dijo "Yo soy". Te invitamos a nuestra nueva serie de prédicas, basada en lo que Jesús nos revela sobre Sí mismo.
Cada principio de año, tenemos por costumbre examinar nuestros hábitos. Celebra con nosotros la gracia de Dios que nos salva y nos da las fuerzas y la disciplina necesaria para crecer en nuestro andar con Él a través de la lectura de Su Palabra, la oración, y al congregarnos.
En esta serie de prédicas aprenderemos cómo un pueblo, con la ayuda de Dios, pudo medrar en medio de circunstancias trágicas. Al estudiar este libro juntos, también veremos cuán relevante el mismo permanece hoy en día, en medio de nuestro presente clima cultural.
Cuando el Espíritu Santo guía nuestras vidas, es evidente. La Palabra de Dios dice que la evidencia de la presencia del Espíritu en nosotros no es mostrar dones espectaculares, sino un fruto que crece en nosotros sobrenaturalmente. Aprendamos juntos cómo Dios nos está cambiando desde adentro.